El próximo día 11 de abril se celebra el Día Internacional del Parkinson, una de las enfermedades neurológicas más discapacitantes. En España hay más de 120.000 afectados por esta enfermedad neurodegenerativa que puede aparecer a cualquier edad incrementando su incidencia con la edad. "Sabemos que el tratamiento puede influir en la evolución de la enfermedad por ello es esencial el conocimiento de la farmacología que se emplea en esta enfermedad y sus efectos en el pronóstico de la misma por lo que es necesario una buena relación neurólogo-paciente" señala el Dr. Juan Carlos Martínez Castrillo, Coordinador del Grupo de Estudio de Trastornos del Movimiento de la Sociedad Española de Neurología.
El temblor es con seguridad el síntoma más conocido pero no el más discapacitante, los enfermos de Parkinson padecen otros síntomas más incómodos como la torpeza, la lentitud o la pérdida de equilibrio que incapacitan al paciente para realizar tareas cotidianas haciéndole sentirse torpe y dependiente.
Por ello, en la vida de estos enfermos el cuidado del familiar se hace imprescindible. El impacto de la enfermedad en el paciente y su entorno es muy importante. El afectado se siente poco comprendido por la sociedad, causado por un lado, por el total desconocimiento de los demás y también por el miedo a padecerla de las personas de su entorno. "Por ello el esfuerzo de las asociaciones de pacientes en el apoyo de estos enfermos y sus familiares y en la demanda de mayores prestaciones socio sanitarias es encomiable" añade el Dr. Martínez Castrillo. Y es que el tratamiento de la enfermedad del Parkinson no se limita a la medicación, es necesario un apoyo psicológico, fisioterapéutico y social.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario